6 Frases que te delatan como YOGUI

​Puede ser en un retiro, en un libro o en una clase de YOGA. 

Lo cierto es que al iniciar este camino empezamos también a adquirir un nuevo lenguaje. Esto permea a varios niveles, desde nombrar partes específicas de tu cuerpo con tus recientes conocimientos anatómicos, mantras, palabras en sánscrito, sin olvidar las típicas frases que escuchas durante una clase.  En algún momento, nos vemos usando esas mismas frases que se quedan resonando entre las paredes de tu cabeza hasta encontrar un sentido, hasta que se asientan y entonces toman un lugar en tu vida. 

Foto: Mindbodygreen

1.- Escucha tu cuerpo

Cuántas veces estamos practicando vemos lo que hacen los demás y obligamos a nuestro cuerpo a hacer lo que los demás hacen. Respetar nuestros propios limites sin dejar de intentar cuando sabemos que podemos ir mas lejos nos conduce al descubrimiento de este equilibrio entre exigencia y humildad, reconociendo que cada día es diferente y aceptando el presente tal cual es. Entonces, creamos posturas desde el corazón y no desde el ego.

2.- Cierra los ojos

Algunos maestros nos piden cerrar los ojos y muchas veces encontramos resistencia al hacerlo porque nos encanta comparar, nos encanta razonar todo nivel mental. Nos encanta saber que algo existe y buscamos a como dé lugar la evidencia, escuchar, ver, oler, tocar. Nos da seguridad. Al cerrar los ojos estamos apagamos todo lo que existe afuera, esto permite desconectarnos de lo físico para lograr ir hacia adentro. Dejamos de pensar y comenzamos a ser, experimentar, sentir y disfrutar.

3.- Respira

Respirar te obliga a ser consciente y a estar presente. A seguir tu ritmo y a conectar. La práctica de Yoga nos enseña que la respiración es uno de los elementos más importantes no solo al meditar o realizar posturas, tomarla en cuenta a lo largo del día nos ayuda a permanecer en el centro, evitar o presenciar cuando nuestras emociones se disparan, a mantener la calma ante situaciones difíciles. Nos brinda un estado de paz.

4.- Fluye

No pasa nada, solo suelta deja ir y sigue adelante.

Aprender a no atorarnos solo respirar y dejar pasar. Nada es para siempre. No sufras ni te aferres a un resultado. Acomódate y fluye hasta que eso también cambie.

5.- Observa

Medita en tus posturas observa tus pensamientos sin engancharte con ellos. Déjalos pasar sin juzgar. Nada esta bien, nada esta mal, las cosas simplemente son. Observa el ritmo de tu respiración, observa tu cuerpo, observa como te sientes, obsérvate y conócete. Mantente observando y cuando te des cuenta que dejaste de hacerlo simplemente retoma.

6.- Siente

Conecta, se, existe, disfruta, hazte consciente, vive.

¿Qué pasaría si pusiéramos en práctica este lenguaje yogui no solo en nuestra práctica sino en nuestra vida? Si ante cada situación pudiéramos parar por un momento cerrar nuestros ojos y escuchar qué es lo que necesita nuestro cuerpo. Impulsaríamos la costumbre de estar conectados con nuestra respiración,í fluiríamos mejor, observando cada situación desde adentro y disfrutando felizmente que las cosas sean, como son.