Geometria fractal y su relacion con la estructura escondida de todo ser viviente....

En 1978, un científico trabajando para la empresa Boeing, Carpenter, aplico los principios de la geometría fractal presentados por el matemático francés de origen polaco Benoît Mandelbroot (1924-2010) en su libro “Fractals, forms and dimensions”, con el fin de crear un paisaje de montañas con fines publicitarios. Después de realizar este descubrimiento, Carpenter, dejo Boeing y fue a trabajar para George Lukas, en específico para la película Star Strek II. Mandelbroot invento la palabra “fractales” en 1975, dándole la definición siguiente: Un fractal es un objeto geométrico cuya estructura básica, fragmentada o aparentemente irregular, se repite a diferentes escalas. El término deriva del latín fractus, que significa quebrado o fracturado. Muchas estructuras naturales son de tipo fractal. Mandelbroot publica después el libro “The fractal geometry of nature” en 1982. La clave de este descubrimiento, en mi opinión, es que muestra una nueva forma de mirar las cosas: Mandelbroot veía cosas, las mostraba y, de repente, las demás personas confirmaban que también las veían. La clave que Mandelbroot ofreció es la siguiente: “no pienses en lo que estás viendo, sino piensa en el proceso que fue implicado para lograr lo que estás viendo.” Similaridad de los padrones: en la naturaleza, los bosques, los árboles, las arterias, todo lo que existe, existe una repetición infinita de los mismos patrones. Hasta los setenta, las matemáticas clásicas fueron útiles para analizar lo que el Hombre ha construido: edificios, pirámides, etc... Al contrario, a partir de los setenta, la geometría fractal permite descubrir el orden que se encuentra debajo del caos, en la naturaleza y la biología. Uno puede preguntarse por qué se tuvo que esperar hasta los setenta para observar esta repetición en la naturaleza. La realidad es que hubo quien observaba esta repetición, como, por ejemplo, el gran ilustrador japonés Hokusai en el siglo 19. Katsushika Hokusai (葛飾 北斎?), conocido simplemente como Hokusai (北斎?) (Edo, actual Tokio, 31 de octubre de 1760 - 10 de mayo de 1849) fue un pintor y grabador japonés, adscrito a la escuela Ukiyo-e del periodo Edo. Es uno de los principales artistas de esta escuela conocida como «pinturas del mundo flotante». 1También es conocido por la diversidad de nombres que utilizó a lo largo de su carrera profesional, Shunro, Sori, Kako, Taito, Gakyonjin, Iitsu y Manji. Fue autor de una obra inmensa y variada. Realizó grabados de paisajes, las Treinta y seis vistas del monte Fuji (富嶽三十六景, Fugaku Sanjūroku-kei)(ca. 1830-1833) y las Cien vistas del monte Fuji (1834), que reflejan en parte una fijación personal con el Monte Fuji. A mediados del siglo XIX sus grabados, así como los de otros artistas japoneses, llegaron a París. Allí eran coleccionados, especialmente por parte de artistas impresionistas de la talla de Vincent Van Gogh, Claude Monet, Edgar Degas y Henri de Toulouse-Lautrec, cuya obra denota una profunda influencia de los grabados mencionados. La vida de Mandelbroot cobra muchos aspectos interesantes: Mandelbroot era una persona resiliente. Durante la ocupación alemana de Francia, Mandelbroot se escondía sistemáticamente, y evito el arresto y la deportación. Confiaba en sí mismo. Después de la guerra, hizo un PhD y no le fue bien en la academia francesa, muy ortodoxa para un espíritu libre como el, y prefirió entrar a trabajar en IBM. IMB le presento a Mandelbroot un problema para transmitir datos a través de la conexión telefónica y observo los padrones de comunicación telefónica. Descubrió la similaridad en los padrones de sonido de las comunicaciones telefónicas, los cuales le recordaron al trabajo de los monstruos geométricos del matemático Georg Cantor. Mandelbroot aplico la geometría fractal a la medida de las costas de un territorio, con el fin de conseguir una medida mucho más precisa que las matemáticas clásicas calculaban. Cuando Mandelbroot hizo su descubrimiento, fue muy mal recibido en la comunidad de matemáticos, ‘”el establishment”. Lo describían como un mal matemático. Fue en ese momento que Mandelbroot publica su segundo libro, “The fractal geometry of nature” (1982), el cual describe la aplicación concreta de la geometria fractal. Los fractales han permitido nuevos descubrimientos: 1) En el campo de las telecomunicaciones: diseño de antenas satelitales, con una capacidad incrementada para captar frecuencias más amplias. Hoy las antenas fractales se encuentran en todos los celulares. 2) En biología: para captar los patrones de las pulsaciones del corazón. El pulso del corazón no es idéntico, tiene fluctuaciones. Por medio de la geometría fractal, se descubrió que los patrones de las pulsaciones del corazón se parecen mucho a la arquitectura de las montañas, de la naturaleza. 3) Todavía en biología: la geometría fractal ha permitido mostrar como el ojo absorbe la información. Ha permitido escribir la trayectoria del ojo. Ha demostrado que el ojo absorbe información de manera global. 4) En medicina, la geometría fractal podría permitir detectar pequeños tumores. Actualmente la aparición de los primeros signos de cáncer es muy difícil de observar. La geometría fractal permitiría observar la estructura de los vasos sanguíneos que se modifican con la aparición de la enfermedad. 5) Respecto de la biología animal y humana, una reflexión se lleva a cabo sobre la capacidad de los animales de usar su energía de la mejor manera. Se ha descubierto que más masivo es el ser vivo, menos energía se requiere para mantenerse vivo. Esto se había descubierto en los setenta pero no se había encontrado ninguna explicación matemática. La geometría fractal aplicada al código genético se vuelve muy útil en ese aspecto. En 1997: se anuncia que la geometría fractal detiene la llave de la relación entre energía y masa en los animales. 6) Como los bosques permiten luchar contra el cambio climático: Hoy en día, gracias a la geometría fractal, se puede experimentar si la estructura fractal de un solo árbol permite predecir la estructura global de un bosque entero. Por medio de la geometría fractal, se puede calcular cuánto dióxido de carbono un árbol puede absorber y por ende, cuanto dióxido de carbono un bosque puede absorber. Un bosque tiene una estructura prácticamente idéntica a la estructura de un solo árbol, la cual tiene una estructura prácticamente idéntica a la distribución de ramas en un solo árbol… Conclusión: Hay un orden en toda cosa viviente y la geometría fractal ha permitido revelar esta verdad tan importante, la cual demuestra la relación que existe entre cada ser viviente. Este argumento permite definitivamente luchar contra la idea de fragmentación de nuestro universo, interno e externo.
Kumaré
Resumen de Filosofía del Manual para el practicant...
 

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