Estar vivo, significa que algún día ya no lo estarás.

Estar vivo, significa que algún día ya no lo estarás. Todo lo que nace, se muere. Así es la vida y no hay nada que podamos hacer al respecto. La existencia todavía es un misterio y personalmente dudo que algún día lo podamos resolver.

¿Qué significa estar vivo?¿Qué significa estar muerto?¿Para qué nacemos?¿Cuál es el propósito del ser?

A lo largo de la humanidad, las diferentes sociedades y civilizaciones han tenido puntos de vista sobre estos temas, tan diversos como ellas. Algunos celebran la vida, otros la muerte, algunos ambas y hay otros que ninguna. Existen creencias y tradiciones alrededor del planeta que se han desarrollado con el paso del tiempo y la evolución del pensamiento del hombre.

Es interesante conocer sobre religiones alrededor del mundo. Aprender sobre las deidades a las que adoran y los símbolos en los que creen. Es inevitable darse cuenta de las similitudes entre ellas. Claro que cada quién da forma y nombre diferentes, pero creo que en fundamentos, todas parten de lo mismo: el intento del ser humano de comprender por qué está aquí. La fe es algo muy personal y único. Cada persona le da su propia interpretación y valor.

Nuestras creencias dependen en gran medida de nuestro contexto y de nuestro karma. La época y el país en el que vivimos, la familia y clase social a la cuál pertenecemos, nuestro género y edad, todo lo que hemos hecho y visto durante nuestra vida. No hay dos cabezas en este mundo que piensen exactamente igual. Eso es lo que nos da tanta riqueza e interculturalidad.

Yoga significa unión. Es inclusivo, no discrimina. Acepta a cada individuo con sus características únicas. Es aquí en donde nada está bien ni mal, las cosas simplemente son. Podemos darnos cuenta de que aunque la forma sea diferente, la finalidad es igual.  A fin de cuentas, todos venimos de lo mismo y vamos hacia el mismo lugar. Cada ser es único, pero nuestras almas son iguales. Estamos hechos de lo mismo. Yoga nos ayuda a darnos cuenta de esto. De ir hacia adentro y tratar de entender qué es lo que significa la vida para ti.

La vida es tan maravillosa como efímera. De un momento a otro aparece y en un segundo se destruye. Cada ser vive la vida desde donde está y nada más. Es imposible saber qué se siente ser alguien más, siempre vas existir siendo quién eres. Por eso la fe puede ser algo tan personal. Lo que para ti es verdad, es la realidad, pero eso no significa que lo sea para alguien más.

Aunque el tiempo es relativo, cada segundo pasa y no regresa. Seguimos existiendo, la vida sigue todo el tiempo. Nos vamos moviendo, todo se va transformando. La única constante en la vida es el cambio. Cada segundo nacen y mueren seres en todas partes, una infinidad de ciclos que suceden de manera simultánea a través del universo. Pero como individuos, tenemos esta vida y nada más. Por el momento.

De aquí la importancia de estar presente. De desarrollar la consciencia en cada segundo. Yoga no te dice qué pensar o en qué creer, te dice que observes. Que te des cuenta. Así podrás aprovechar y ser dueño de cada instante que conforme tu vida.

Si te observas, sin juzgar, podrás conocer lo que hay dentro de ti. Podrás conectarte con esa fe que vive en tu corazón. Sin importar como sea, pero eso que para ti es real. Si aprender a comprender y aceptar lo que eres, podrás encontrar la paz verdadera. Estar en armonía contigo mismo y por ende, con el universo que te rodea.

¿Qué significa estar vivo?¿Qué significa estar muerto?¿Para qué nacemos?¿Cuál es el propósito del ser?

No importa cuales sean tus respuestas a estas preguntas. No importa si no tienes respuestas a estas preguntas. Nada es importante en realidad, más que lo que tu quieres que sea. Yo pienso que venimos a la vida nada más que a vivirla. A disfrutar cada instante, sea como sea. El poder que tenemos sobre lo que puede pasar es realmente muy pequeño. Las cosas nunca van a ser exactamente como pensamos o queremos que sean. Para eso existe la fe.

Ishvara Pranidhana. Entrega total. Confianza en el universo. Fe. Libre de cuestionamientos, libre de expectativas.  La vida sucede, así como nacimos moriremos. Pero en este momento, estamos vivos. Podemos respirar, podemos darnos cuenta de que respiramos, podemos darnos cuenta de que nos damos cuenta. Si agradecemos por este simple hecho y nos entregamos a la grandeza del gran misterio de la vida, viviremos en paz.