Patanjali define el objetivo final del yoga como “la cesación de las fluctuaciones de la mente”. Al practicar yoga, nos dice, aprendemos gradualmente a enfocar la mente de manera que no existan distracciones en nuestro pensamiento y podamos así comprender completamente el objeto de nuestra atención.
“Los objetos que nos resultan placenteros no tienen propiedades por si mismos. Lo que nos produce placer es el hecho de que mientras estamos con ellos, nuestra atención esta enfocada únicamente en ese objeto. Ese es el placer: la atención indivisa que nos inunda, sin darnos cuenta, de ese maravilloso sentimiento de unidad.”
En términos generales, la persona que se adentre en la práctica habitual y constante encontrará que:
· Físicamente la respiración, energía, vitalidad y metabolismo se normalizan e incrementan.
· Mentalmente es más fácil mantener la calma y manejar situaciones estresantes hacia el resultado deseado.
· Emocionalmente se eleva la consciencia corporal, la sentimental, el sentido de comunidad y propósito, además de la interacción entre cuerpo, mente y espíritu.
Etimología y Origen
Por definición, de acuerdo a su raíz sánscrita (Juj) Yoga que quiere decir unión. De esta raíz se derivan algunas palabras de nuestro vocabulario como cónyuge o yunta.
Tradicionalmente se considera como Yoga aquellos sistemas filosóficos y prácticos que enseñen los medios mediante los cuales el Jivatman (espíritu humano) pueda ser unido o quedar en comunión con el Paramatman (espíritu universal). A este estado se le denomina Samadhi.
Esto se puede entender como ser uno, estar unido, sentirse completo, estar en unidad, o cientos de otras acepciones. El Yoga es un medio, una vía o camino hacia la eliminación del sufrimiento.
También ha sido descrito como la forma habilidosa de vivir en armonía y con moderación. El Bhagavad Gita dice: -“El Yoga no es para el que duerme mucho ni para el que permanece siempre en vela”. Yoga un proceso y no un resultado. Es un camino de equilibrio y evolución.
La prueba arqueológica más antigua encontrada a la fecha, data aproximadamente del año 3000 a.C., y se trata de sellos de piedras con figuras de posiciones yóguicas pertenecientes a las civilizaciones de los Valles del Indo y Saraswati.
Los Vedas son cantos sagrados que dan origen a gran parte de la cultura, filosofía y religión hindú. Constituyen un acopio de sabiduría en el campo del conocimiento del ser humano a nivel físico, metafísico y puramente espiritual. Este conocimiento védico se conservó de generación en generación por tradición oral, mediante la recitación de su contenido en forma de aforismos.
Los primeros védas son: Rig Veda, Atharva Veda, Yajur Veda y Sama Veda, los cuales se remontan aproximadamente al año 2500 antes de Cristo. De estos los que más se relacionan con el yoga son el Atharva Veda, en el cual se habla de prácticas de respiración o pranayama y el Rig Veda, en el que la palabra yoga o su raíz (yuj) se menciona frecuentemente.
En occidente la parte más conocida de los Vedas son los Upanishads, escritos 500 años antes de Cristo. Son tratados o poemas filosóficos y místicos que exploran la naturaleza del alma humana. Se tienen registros muy antiguos de los Katha Upanishads que describen al yoga así:
"Cuando los sentidos son calmos, cuando la mente esta en descanso…-”, recién ahí, dice el sabio, -"...se llega al estado más elevado y se conoce la realidad del ser supremo."- Este firme control de los sentidos y la mente ha sido definido como Yoga.
Contemporáneos a los Upanishads son dos grandes poemas épicos: el Ramayana de Valmiki, y el Mahabharata de Vyasa, narraciones que tratan temas morales y filosóficos. Una parte importante del Mahabharata es el Bhagavad Gita; este consta de dieciocho capítulos, en los que se discuten distintos aspectos del Yoga: Karma yoga (acción), Jñana yoga (conocimiento) y Bhakti yoga (devoción). Estos caminos son expuestos magistralmente en un diálogo entre Krishna, la encarnación del dios Vishnu y Arjuna, su noble discípulo, durante el cual Krishna aclara que el Bhakti yoga o yoga de la devoción es el camino más rápido. -“Aquel yogui que me ve en todos los lugares y que ve todo en mi, para él no estoy perdido ni él esta perdido para mi”.
Unos años mas tarde Patanjali, recopiló todo el conocimiento existente sobre el Yoga en los Yoga Sutras, texto básico reconocido unánimemente por todas las escuelas yóguicas.
Patanjali
Los Yoga Sutras de Patanjali son la base del Raja Yoga, pero trata todas las ramas del Yoga. Constituye lo que podríamos llamar el Yoga Clásico.
Consta de 195 aforismos. Tratan, fundamentalmente de dos aspectos; la descripción de las funciones de la mente y la enumeración de los medios mediante los cuales puede lograrse el Yoga o el control sobre las distracciones de la mente.
Este compendio se divide en cuatro libros:
1) Samadhi Pada, consta de 51 aforismos y trata sobre la naturaleza del Yoga. Presenta el Yoga como medio para calmar y conocer a la mente. Describe los estados mentales y los distintos niveles de conciencia.
2) Sadhana Pada, consta de 55 aforismos y trata del porqué de la práctica del Yoga, y de los medios para realizarla. Medios para dirigir la mente desde la dispersión hasta un alto estado de concentración.
3) Vibhuti Pada, consta de 55 aforismos y trata de los poderes, percepciones extra sensoriales o siddhis que se adquieren con la práctica avanzada del Yoga y explica que estos no son un objetivo en si, y que el apego a ellos puede suponer una gran trampa que provoca la perdida de los logros obtenidos previamente.
4) Kaivalya Pada, consta de 34 aforismos y trata filosóficamente de la naturaleza del conocimiento. Describe la emancipación de la mente y la realidad espiritual del Universo.
Los Yoga Sutras son difíciles de entender, por el tema que ocupan, por los conceptos filosóficos que aparecen y por que la vida y el pensamiento contemporáneo parecen muy lejanos de estás enseñanzas clásicas. Muchos autores a lo largo de la historia han comentado los Yoga Sutras de Patanjali.
Patanjali enumera las causas del sufrimiento en cinco, siendo Avidya la más importante. Significa comprensión defectuosa de la realidad y da origen a las otras cuatro causas de sufrimiento: el egoísmo, el apego, la aversión y el miedo a la muerte. Avidya quiere decir que no vemos las cosas como son en realidad, lo único que podemos ver es la historia que nos contamos a nosotros mismos sobre lo que es la realidad, distorsionada por nuestros miedos y apegos.
La práctica permite notar y ser consiente de las historias que uno se cuenta a si mismo y empezar por aceptar que solo son puntos de vista y que no es una realidad absoluta, esta postura ayuda a poder fluir con las circunstancias que la vida va planteando momento a momento.